Esta es una profesión muy exigente. Todas lo son, pero la nuestra de manera particular. El motivo es que nosotros convivimos con ella veinticuatro horas al día. No podemos cerrar nuestra oficina a las cuatro de la tarde y ocuparnos de otras actividades. Éste es un trabajo que ocupa toda nuestra vida, no hay otro modo de ejercitarlo. O, al menos, de hacerlo de un modo perfecto.
Nada altera mi concentración. Podrías hacer una orgía en mi oficina y yo no miraría. Bueno, quizá una vez.
Una figura excepcional entra en la historia. El nombre de Francisco Franco, será ya un jalón del acontecer español y un hito, al que será imposible dejar de referirse para entender la clave de nuestra vida política contemporánea. Con respeto y gratitud quiero recordar la figura de quien durante tantos años asumió la pesada responsabilidad de conducir la gobernación de estado.
Mi idea de una gran cancion es una canción que dice como me siento lo mejor que puedo. Siento lo mismo acerca de las tarjetas de felicitación. Siempre he estado fascinada por los sentimientos y como los expresamos a los otros. Llegar a escribir y diseñar estas tarjetas es una experiencia maravillosa.
En idiomas de zonas donde no ha habido un estado no existe la palabra guerra.